Regina Pimenta sabe lo que es vivir con miedo, angustia e incertidumbre. Durante años, arrastró una deuda que superaba los 22.000 euros , lo que le impedía tener tranquilidad, tomar decisiones con libertad o simplemente dormir bien por las noches, hasta que conoció a Debify. Como muchos autónomos y trabajadores en España, Regina intentó salir adelante como pudo, pero la presión de los pagos, los intereses y la falta de soluciones reales la llevaron al límite.
Hoy, Regina puede decir con una sonrisa tranquila que ha vuelto a empezar. Gracias a la Ley de la Segunda Oportunidad y al acompañamiento de Debify, su deuda ha sido totalmente cancelada. Y con ella, también se fue el miedo que llevaba años pesando sobre sus hombros
El inicio de una etapa difícil
Para Regina, el inicio del problema fue como para muchos: pequeñas deudas que, con el tiempo, se volvieron una bola de nieve. Tarjetas de crédito, préstamos personales, impagos de seguros y hasta facturas médicas. Los importes crecían, los intereses se acumulaban y las gestiones de cobro se volvían cada vez más insistentes.
Entre sus acreedores se encontraban entidades como CaixaBank, con varias tarjetas y un préstamo personal; Divina Pastora; INTRUM; KRUK; ID Finance; Bulnes Capital; CR Collections y otros. En total, acumulaba 22.208,67 € en deudas, muchas de ellas derivadas de productos financieros que terminaron siendo impagables. La situación llegó a afectar gravemente su salud mental
Descubriendo la Ley de la Segunda Oportunidad
El punto de inflexión llegó cuando Regina escuchó hablar por primera vez de la Ley de la Segunda Oportunidad. Hasta entonces, no sabía que existía una herramienta legal que permitía cancelar deudas de forma definitiva y empezar de nuevo.
Empezó a informarse por su cuenta y a buscar ayuda, pero se topó con muchas trabas. Algunas entidades, incluso bancos, le pedían abrir cuentas nuevas o ingresar dinero por adelantado, lo que le generaba mucha desconfianza.
Fue entonces cuando dio con Debify, y todo cambió. Desde el primer contacto habló con Laura, que la escuchó atentamente y le explicó cada paso con total claridad. Laura le presentó a los abogados José María y Patricia, y Regina recuerda:
“Con ellos sentí desde el primer minuto que estaba en buenas manos. José María me transmitía confianza al hablar de los trámites y Patricia me acompañaba en cada detalle. Estoy muy contenta con los dos; su cercanía y profesionalidad marcaron la diferencia.”
Con Debify, Regina encontró el respaldo humano y legal que necesitaba para dar el paso y, finalmente, comenzar a construir su nueva vida sin deudas.
La decisión de confiar en Debify
Regina contactó con varias empresas, pero la experiencia con Debify fue diferente desde el primer momento. “Sentí que no me hablaban como a un número. Me escucharon, me explicaron todo con claridad y me dieron la confianza que necesitaba para dar el paso”, recuerda.
Con la ayuda del equipo legal de Debify, Regina inició su proceso de acogida a la Ley de la Segunda Oportunidad. El equipo se encargó de preparar toda la documentación, gestionar los trámites judiciales y acompañarla en cada etapa.
Un proceso con final feliz: exonerada de más de 22.000 €
A pesar de los nervios y la incertidumbre, Regina no estuvo sola. “Hubo momentos de miedo, de preguntarme si esto saldría bien. Pero siempre tuve el apoyo del equipo, especialmente de Patricia. Me sentí arropada.”
Finalmente, el juez dictó la exoneración total de sus deudas: 22.208,67 €, incluyendo tarjetas, préstamos personales y deudas con entidades como CaixaBank, Divina Pastora, INTRUM, ID Finance y más.
“No lo podía creer… me caí de la cama del impacto”, afirma con alivio.
Una nueva vida sin miedo
Hoy, Regina ha recuperado la calma, la dignidad y la posibilidad de mirar al futuro sin miedo.
“Fue el mejor regalo de Reyes que me han podido dar”, afirma con una sonrisa.
La exoneración de sus 22.208,67 € de deuda no solo le permitió empezar de nuevo económicamente, sino que también tuvo un impacto profundo en su bienestar general.
“Mi salud ha mejorado muchísimo. Ya no tengo ansiedad, duermo tranquila y ahora soy mucho más consciente de lo que hago con mi dinero. Me ha ayudado a tener el control de mis finanzas, algo que antes parecía imposible.”
Regina destaca especialmente la cercanía y el trato humano recibido durante todo el proceso:
“Con Debify me sentí como en casa. Siempre estuvieron ahí, resolvían mis dudas al momento, me escuchaban, me entendían. Y eso, cuando estás tan vulnerable, vale oro.”
¿Tú también quieres empezar de nuevo?
Si tú también estás atrapado en una situación de sobreendeudamiento, como lo estuvo Regina, recuerda que hay una salida legal y segura. En Debify te acompañamos paso a paso para que puedas liberarte de tus deudas y recuperar tu tranquilidad financiera.
